Segunda niñez
Desarrollo físico:
Les gusta jugar con lodo, brincar en los muebles, hacer música con diferentes objetos, pintar y dibujar.
Desarrollo cognoscitivo:
La edad de los disfraces, pues empiezan a imitar.
Empiezan a saber cuando han actuado mal con respecto a otros.
Más observadores y atentos a lo que hacen y dicen los adultos y sobre todo los niños mayores a quienes imita y repite sus palabras.
Empiezan a medir peligros y presentan miedos concretos.
Empiezan a comprender un cuento sobre todo si tiene relación con su vida diaria y los personajes son semejantes a quienes comparten con él.
Desarrollo de la personalidad y afectivo:
Suelen ser necios y obstinados en lo que quieren, por ejemplo usar una misma ropa, etc.
Los varones se acercan a su mamá y las niñas a su papá, pues están descubriendo su género y lo tienen que contrastar con el otro.
Desarrollo social:
Siguen jugando al lado de otros niños, sin embargo empiezan a compartir y a ceder los juguetes.
Desarrollo físico:
Pierden completamente el aspecto regordete y se estiran.
Desarrollo cognoscitivo:
Curiosidad intelectual y se interesan por saber acerca de los animales, los planetas, etc.
Miden a los adultos con palabras, es decir preguntan incesantemente por qué.
Presentan juego simbólico jugando por ejemplo con cartón y armando una casa.
Desarrollo de la personalidad y afectivo:
Descubren el mundo y se identifican con los superhéroes imitando incluso la voz y afirmando que son fuertes y valientes.
Aumentan los temores, pues a pesar de que no comprenden lo que escuchan de los adultos o de la televisión se saben frágiles y vulnerables.
Saben lo que no le gusta al adulto que hagan y por eso suelen mentir y esconder lo que hicieron.
Separación de la madre para autocomprender su mundo externo con base en la presencia materna, paterna y filial.
Inicia a advertir diferencias sexuales en su mundo lo que conlleva aprendizajes sobre lo que debe ser su sexo y su comportamiento social.
Los padres fungen como el espejo de identificación en ideas, valores y como persona.
Es independiente para realizar acciones: dar órdenes y hablar mucho, cuenta historias exageradas, chismea.
Aún no distingue con claridad entre lo bueno y lo malo, por la imaginación tan despierta.
Desarrollo social:
Los niños consideran que las niñas son lloronas y las niñas no hacen caso a los niños.
Suelen interrogar a los adultos que conocen o tienen cerca, incluso con extraños, ya que es mayor su curiosidad que su pudor social.
Empieza a pensar en referencia a otros.
Cinco años Desarrollo físico:
Les atrae dibujar y pintar.
Su rendimiento físico parece no agotarse; cansan al adulto y ellos se mantienen con fuerza.
Desarrollo cognoscitivo:
La imaginación y la fantasía se encuentran en su máximo esplendor, les fascina escuchar historias y ellos agregarles, incrementarles, argumentarles, es decir usan su mente. Siguen jugando al lado de otros niños, sin embargo empiezan a compartir y a ceder los juguetes.
Les agrada dibujar, sin embargo una vez terminado el trabajo no le ponen más interés y se deshacen de él.
Principio de realidad psicológica y conductual, menos egocentrismo, más autoidentidad.
Aparecen los ¿por qué?, frecuentes.
Desarrollo de la personalidad y afectivo:
Su fuerza de voluntad aún no la dominan por lo que comprenden lo que se les dice pero muchas veces no lo hacen, como por ejemplo no poder esperar por comerse una golosina antes de comer.
Se conducen por sus impulsos, por lo tanto suelen aparentar ser agresivos, sin embargo son despiertos, juguetones y despreocupados.
Cuando se ponen nerviosos se hacen los chistosos.
No les gusta perder y se les notar, se enojan, abandonan el juego, pelean.
Incorpora dentro de su conciencia lo que el progenitor es realmente como persona y no simplemente lo que trata de enseñarle.
Busca frecuentemente la aprobación de la madre.
Sentido elemental de la vergüenza y deshonra.
Presencia de miedo y ansiedad.
Desarrollo social:
Viven convencidos que el otro sexo es insoportable, pues están afirmando el propio y hacen repelar a los del otro sexo.
Dispuestos a ayudar pero con la finalidad de diversión, entretenimiento, juego, no se preocupan por hacerlo bien, por la obra bien hecha.
El juego es colectivo a través de seguimiento de reglas que el adulto pone. Se pelean con quienes hacen trampas.
Nota técnica elaborada por la maestra Itziar Zubillaga Ruenes para fines académicos; revisada marzo 2009
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